Internet como servicio público: En un importante avance para la sociedad digital en Chile, la Cámara de Diputados ha aprobado, tras una larga tramitación, el proyecto que consagra a Internet como un servicio público. Esta iniciativa fue impulsada durante el segundo gobierno de la ex presidenta Michelle Bachelet y, una vez promulgada la ley y aprobados los reglamentos asociados, permitirá que la provisión de internet sea fiscalizada de la misma forma que la telefonía móvil.
Claudio Araya, Subsecretario de Telecomunicaciones, destacó este logro, señalando que representa un gran paso en el reconocimiento de derechos en una sociedad cada vez más digital. Según Araya, la aprobación del proyecto permitirá que las familias del país reciban una respuesta clara y oportuna acerca del tiempo que demorarán en acceder a los servicios de Internet.
El subsecretario enfatizó que las empresas no podrán argumentar limitaciones de cupo o factibilidad técnica para no proveer Internet fijo en diferentes zonas del país. Esta decisión es un avance significativo en la conectividad digital en todo el territorio nacional, promoviendo la equidad y reduciendo las brechas de acceso.
Alejandra Maureira, Seremi de Transportes y Telecomunicaciones, expresó que uno de los desafíos de su ministerio es acortar brechas y emparejar la cancha. Maureira señaló que muchas localidades rurales se quedaban fuera de la conectividad digital porque las empresas no tenían incentivos comerciales para llegar. Pero gracias a este proyecto, la garantía de acceso a la conectividad digital de las personas, independientemente de dónde vivan, es lo que prima.
El proyecto de ley proporciona una serie de beneficios, incluyendo la profundización de la obligatoriedad de las empresas para prestar servicios de conectividad digital en todos los lugares donde tengan cobertura. Esto elimina el concepto de zonas rojas como una limitación para la provisión de servicios en determinadas zonas del país.
Además, la Subsecretaría de Telecomunicaciones fortalecerá su labor fiscalizadora y podrá incrementar las sanciones y multas por incumplimientos legales y regulatorios por parte de las empresas de telecomunicaciones. También permitirá la creación de mecanismos para otorgar subsidio a la demanda, lo que ayudará a las familias a costear los planes de Internet hogar.
Este paso hacia la digitalización de la sociedad chilena es un importante avance en la garantía de los derechos digitales, la equidad en el acceso a servicios de Internet y la reducción de la brecha digital. Al consagrar a Internet como un servicio público y permitir su fiscalización al igual que la telefonía móvil, se asegura que las empresas de telecomunicaciones cumplen con su deber de proveer servicios de conectividad digital a todas las zonas del país, eliminando las limitaciones de las llamadas zonas rojas.
Además, al fortalecer la labor fiscalizadora de la Subsecretaría de Telecomunicaciones y permitir la creación de mecanismos de subsidio a la demanda, se garantiza que las familias puedan costear los planes de Internet hogar. Con estas medidas, Chile da un paso importante hacia una sociedad más digital y equitativa, donde el acceso a Internet no es un lujo, sino un derecho.