La falta de mujeres en política es una preocupación que se ha convertido en un tema central en la región de Coquimbo, con las próximas elecciones de alcaldes, concejales, gobernadores y consejeras regionales 2024 en el horizonte. A pesar de que algunas mujeres se han postulado para estos cargos, la representación femenina sigue siendo insuficiente.
Las mujeres citan la falta de tiempo como una de las principales razones por las que no participan en la política. El compromiso que requiere el trabajo político, incluyendo largas horas en las sedes de los partidos, la participación en actividades comunitarias fuera de horario laboral, y el trabajo constante con la comunidad, se vuelve inmanejable a la par de las responsabilidades familiares y del hogar. Las mujeres, especialmente las solteras y aquellas cuyos cónyuges están completamente dedicados a sus empleos, suelen llevar la mayor carga de estos trabajos.
Entre las aspirantes a los cargos más representativos de la región se encuentran Tatiana Castillo, candidata a gobernadora regional; Carmen Olivares, actual alcaldesa de Río Hurtado que busca la reelección; Rayen Pojomovky, Daniela Norambuena y Rosana Adaros, todas compitiendo por el cargo de alcaldesa de La Serena; y por último, Vinka Pusich, quien se postula para líder municipal en Salamanca.
La candidata a la gobernación regional, Tatiana Castillo, sugiere que la falta de cultura política entre las mujeres es una de las principales barreras. Hacer carrera en política requiere un tiempo considerable fuera del horario laboral, lo que puede ser agotador. Castillo también señala que, aunque la participación política de las mujeres está evolucionando, aún hay muchas que optan por priorizar otras actividades en su vida.
Rayen Pojomovsky, candidata a alcaldesa en La Serena, coincide con Castillo en que hay una baja participación de las mujeres en los concejos comunales, aunque se está avanzando hacia la paridad. Pojomovsky también señala que, aunque las mujeres suelen liderar espacios políticos más pequeños como las juntas de vecinos, esto no se replica en los lugares donde se toman las decisiones y se ejerce el poder.
La diputada Nathalie Castillo también comparte esta perspectiva. Según ella, las mujeres que se dedican a la política deben contar con una red de apoyo para poder equilibrar sus responsabilidades laborales y familiares, algo que no se exige a los hombres. Castillo resalta la existencia de brechas, barreras y desigualdades que afectan la participación femenina en la política, como las creencias machistas y la violencia digital.
Por otro lado, Rosana Adaros, precandidata a alcaldesa de La Serena, cree que las mujeres deben tener más confianza en sí mismas y en otras mujeres en el ámbito político. Según Adaros, si las mujeres logran transmitir sus pensamientos, ideales y anhelos de cambio en la sociedad, podrán ganar más terreno en la política y contribuir significativamente a lograr la equidad cultural entre hombres y mujeres.
La representación femenina en la política es un tema que requiere atención y acción. Las mujeres deben sentirse empoderadas para participar en la política y deben recibir el apoyo necesario para equilibrar sus responsabilidades laborales y familiares. La sociedad también debe esforzarse por eliminar las brechas y barreras que impiden la participación de las mujeres en la política.