El gigante de la moda y perfumería, Puig, ha anunciado su deseo de dar el salto al mercado bursátil con un objetivo ambicioso: captar más de 2.500 millones de euros. Para lograrlo, se llevará a cabo una oferta pública de venta (OPV) de nueva emisión, dirigida a inversores cualificados, por un importe de 1.250 millones. A esto se suma otra oferta de venta de acciones ya existentes, de mayor importe, las cuales son procedentes de Exea, el hólding patrimonial de la familia propietaria. Este movimiento ha generado cierta expectación entre los analistas financieros, quienes han comenzado a valorar el potencial rendimiento que ofrecerá Puig en el parqué.
Según el analista de XTB, Javier Cabrera, hay varios factores que hacen de Puig una apuesta atractiva para los inversores. El primero es el componente familiar de la empresa, que, con 110 años de historia, ha demostrado una alta alineación de intereses entre la directiva y los accionistas. Además, la empresa ha sabido mantener un buen historial de adquisiciones de compañías, alentando la colaboración conjunta y garantizando una alineación de intereses con los fundadores de las empresas adquiridas.
Otro factor importante es el alto crecimiento que ha tenido Puig en los últimos años. En 2023, la empresa reportó ingresos de 4.304 millones de euros, cifra que prácticamente alcanza su objetivo para 2025. Cabrera señala que no es la primera vez que Puig supera sus metas financieras antes de lo previsto. Además, la empresa goza de una buena diversificación de sus ingresos, tanto geográfica como de línea de negocio.
Uno de los mercados que ha resultado especialmente favorable para Puig es China. En 2023, la empresa logró un crecimiento del 27% en las ventas en este país, con su marca Charlotte Tilbury a la vanguardia. Con la entrada a bolsa, Puig planea utilizar los ingresos netos de la captación de fondos para fines corporativos generales, como la refinanciación de las adquisiciones de participaciones adicionales en Byredo y Charlotte Tilbury y la financiación de cualquier inversión estratégica futura y gastos de capital.
La estrategia de Puig de entrar en bolsa tiene como objetivo competir en el sector del lujo, que ha mostrado cierta debilidad en los últimos meses debido a la débil demanda. Sin embargo, Cabrera señala que, si comparamos a Puig con gigantes del sector como LVMH, la empresa española muestra un crecimiento significativo, creciendo a doble dígito mientras que LVMH lo hizo en un 7%.
Además, el comportamiento en bolsa de las principales marcas ha sido positivo este 2023, con LVMH y Christian Dior subiendo un 10%, y Hermes con más de un 20% de revalorización. Esta buena dinámica en bolsa del sector probablemente influyó en la decisión de la familia Puig de salir a bolsa ahora.
Finalmente, si se realiza una valoración para Puig basada en el múltiplo al que cotizan algunas de sus comparables, como LVMH o Christian Dior, la valoración total de Puig estaría en un rango de 7.665-10.220 millones de euros, siendo conservadores. Esto confirma que Puig es una opción a considerar para los inversores en busca de nuevas oportunidades en el mercado de lujo.