El precio del barril de petróleo Brent, un referente crucial en los mercados europeos e internacionales, ha experimentado un salto significativo del 1,72% este martes, alcanzando los 88,92 dólares. Este aumento se debe principalmente al incremento de la tensión geopolítica en Oriente Medio, lo que ha llevado al crudo a marcar sus máximos anuales, una tendencia que no se veía desde el mes de octubre pasado.
La situación en Oriente Medio se ha intensificado después de que Irán acusara a Israel de asesinar a uno de sus generales en un bombardeo llevado a cabo por el ejército israelí sobre Damasco, la capital de Siria. Este ataque también ha afectado al consulado iraní en la ciudad siria. Esta acción marca una escalada significativa en las hostilidades en la región, que ya venía agravándose desde el ataque de Hamás a Israel el pasado 7 de octubre.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán, Naser Kanani, ha declarado que su país «se reserva el derecho a tomar contramedidas» y que decidirá sobre el tipo de respuesta y castigo al agresor. En respuesta a esta situación, Rusia ha convocado una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU, programada para este martes.
El precio del petróleo también ha sido influenciado en las últimas semanas por los ataques con drones efectuados por Ucrania sobre instalaciones petrolíferas en Rusia.
Paralelamente, otros factores a nivel global también están contribuyendo al alza en los precios del petróleo. Un buen dato de la actividad manufacturera en China publicado este lunes ha tenido un impacto positivo en las cotizaciones del crudo. La encuesta de manufactura global de Caixin para el mes de marzo ha revelado que la actividad de las fábricas en el gigante asiático se expandió a su ritmo más rápido en 13 meses. El índice PMI se ubicó en 51,1, superando las expectativas que estaban en 51.
China, siendo el principal importador mundial de petróleo, juega un papel crucial en la determinación de los precios del crudo. Un aumento en la actividad manufacturera en este país indica un repunte en la demanda de petróleo a corto y medio plazo.
Estos factores combinados, la tensión en Oriente Medio, los ataques con drones en Rusia, y el aumento de la actividad manufacturera en China, están generando un clima de incertidumbre en los mercados internacionales. Esta incertidumbre, a su vez, está afectando los precios del petróleo, llevándolos a alcanzar máximos anuales.
La evolución de estos eventos será seguida de cerca por los inversores y actores del mercado, ya que cualquier cambio puede tener un impacto significativo en los precios del petróleo y, por ende, en la economía global.