El reciente anuncio por parte de la empresa AES Andes del cierre anticipado de las centrales termoeléctricas Norgener 1 y 2 en Tocopilla, que implica una quema “forzosa” de carbón, ha generado amplio rechazo entre varias organizaciones. La Asociación de Municipalidades de la Región de Antofagasta (AMRA) y el Comité de Salud Ambiental Infantil de la Sociedad Chilena de Pediatría han expresado su preocupación por la salud de los habitantes de la región, especialmente niños y adolescentes.
La decisión de la empresa implica la quema de 94 mil toneladas de carbón en un corto período de tiempo. Según la AMRA, aunque el cierre de las centrales es una medida positiva a largo plazo, las consecuencias a corto plazo de la quema del carbón acumulado podrían tener graves efectos en la salud de la población.
El Comité de Salud Ambiental Infantil destacó la vulnerabilidad de la infancia a los efectos adversos de la contaminación del aire, subrayando el riesgo de impactos respiratorios y cardiovasculares. Tocopilla ha sido declarada zona saturada por material particulado grueso y presenta altos índices de enfermedades relacionadas con la actividad de las termoeléctricas a carbón.
Un estudio de la Universidad Católica reveló que los habitantes de Tocopilla tienen un riesgo significativamente mayor de mortalidad por contaminación que la media nacional. Dada esta situación, tanto la AMRA como el Comité de Salud Ambiental Infantil exigen medidas urgentes al Gobierno para detener esta situación y proteger la salud de la población afectada.
Las organizaciones hacen un llamado a los actores clave en la toma de decisiones para implementar acciones adicionales que garanticen un ambiente saludable en Tocopilla y en todas las áreas afectadas por la transición energética. Ofrecen su colaboración en la creación de programas de educación y prevención dirigidos a las familias y comunidades afectadas, con el objetivo de asegurar un futuro prometedor para las generaciones venideras.
Esta noticia se produce en un contexto donde la quema de carbón y su impacto en el medio ambiente y la salud de la población ha sido foco de debate. Recientemente, organizaciones han celebrado anuncios de cierre de carboneras en Quintero, Puchuncaví y Tocopilla.
El informe publicado por Antofagasta TV y Regionalista.cl también destacó que empresas como Guacolda, Electro Andina, Norgener, Cap Minería y Aes Gener son las que más contaminantes emiten en Huasco, Tocopilla y Puchuncaví.
Además, la empresa Engie ha anunciado el cierre de dos centrales a carbón en Tocopilla, una medida que se suma a la tomada por AES Andes. Sin embargo, estas decisiones no eliminan el hecho de que Tocopilla y Mejillones son consideradas zonas de sacrificio debido a la alta contaminación.
El impacto de la quema de carbón y las emisiones de las termoeléctricas en la salud de la población de Tocopilla es un tema que seguirá generando debate. La necesidad de transitar hacia una matriz energética más limpia y sustentable es evidente, pero el proceso de transición debe considerar el bienestar y la salud de las comunidades afectadas.
